En un discurso de autoalabanza, el gobernador de Mendoza describió un “Estado nuevo” que mejoró sus principales indicadores económicos y sociales. Alfredo Cornejo subrayó el superávit fiscal en las cuentas provinciales y reivindicó tanto el fracking como el ítem aula. No anunció la construcción de nuevas escuelas pero sí un novedoso régimen de becas para docentes basado en el “mérito”. “El nuestro no es un gobierno negador”, dijo el mandatario quien guardó silencio sobre el multimillonario endeudamiento externo, los tarifazos y la creciente inflación.

Fotos: Coco Yañez y Cristian Martínez

Foto: Cristian Martínez

Fueron casi dos horas de un discurso (leer aquí) con pretensiones refundacionales. El gobernador de Mendoza leyó en la Legislatura un texto donde mencionó en más de 25 ocasiones el concepto de “Estado nuevo”, pero ni una sola vez las palabras deuda externa, tarifazo e inflación.

Atrás quedó la humilde “revolución de lo sencillo” proclamada hace un año. Esta vez, el relato de Alfredo Cornejo se centró en los grandes logros alcanzados por su gestión, área por área, en contraste con el Estado anterior “plagado de incapacidades, de bolsones de ineficiencia y gastos improductivos”.

Todo es historia

Foto: Coco Yañez

Sin autocríticas, el mandatario describió una provincia con la tasa de homicidios más baja de los últimos 10 años, con menos pobreza, disminución de tasas de mortalidad infantil y materna y de embarazo adolescente, y con políticas orientadas a reducir la violencia de género.

En su “Estado nuevo” Conejo ocupa un lugar histórico, donde se produjeron las inversiones en agua y saneamiento más importantes “en lo que va del siglo XXI”, las obras eléctricas más significativas de los “últimos 10 años” y una incorporación de 70 máquinas viales nuevas, “algo que no ocurría en esta magnitud desde 1984”.

Foto: Cristian Martínez

 

Foto: Cristian Martínez

“Este Estado nuevo prioriza la vivienda de verdad y ya ha entregado 2.630, gracias a que reactivó el IPV y está construyendo otras 3.195 más”, destacó el líder radical, quien además ponderó la realización de una “extraordinaria e histórica inversión en obra pública”. “En sólo dos años la elevamos del 7% a más del 11% del presupuesto, siendo el plan más ambicioso de las últimas décadas, como salta a la vista”, dijo orgulloso de sí mismo.

“Hemos encarado el programa más grande de infraestructura escolar que recuerde la provincia”, expresó el titular del Ejecutivo y puntualizó: de 26 millones de pesos de inversión durante el último año de la anterior gestión, hemos pasado a 570 millones en la actualidad, de los cuales 450 millones son de fondos provinciales”. Si bien mencionó la reparación de 800 escuelas, no anunció la construcción de nuevos establecimientos.

Foto: Coco Yañez

Jactándose de haber anticipado al gobierno de Mauricio Macri, a quién mencionó informalmente solo una vez en el discurso, en una política de disminución de cargas fiscales, el gobernador puso en valor el “Programa Plurianual de Reducción de Impuestos” que permitió que grandes empresas puedan acceder a un “Bono Fiscal”, entre ellas -y esto no lo dijo- el propio primo del presidente.

“En materia de Turismo, Mendoza movilizó en el año 2017 más de 3,5 millones de turistas, lo que significa un 7% de crecimiento de la demanda respecto de 2016”, expresó el mandatario, al tiempo que enfatizó que se “federalizó” la Cultura “mediante la implementación de los Distritos culturales”.

Foto: Cristian Martínez

 

Foto: Cristian Martínez

Las obras iniciadas en el “Museo Fader” (sic), la reciente inauguración de la Mansión Stoppel, la próxima apertura del “Espacio de Fotografía Máximo Arias” y la “reconversión” del Espacio Cultural Julio Le Parc, a través de los programas “Verano de Culillos” y “Barrio Le Parc”, fueron exhibidos como logros fundamentales del área que conduce Diego Gareca.

Las becadas

Foto: Coco Yañez

La larga alocución del gobernador se centró más en los “avances históricos” que en los anuncios de cara al futuro. Aunque reconoció que “hoy la provincia presenta el primer superávit corriente en 8 años para su presupuesto 2018”, Cornejo solo anunció un nuevo e impreciso plan de viviendas “Mendoza Construye”, una reducción progresiva de impuestos, la compra de un resonador magnético para el Hospital Notti -en una poco transparente alianza con Fundavita– y un régimen de becas para docentes, basado en la meritocracia.

Las páginas finales del discurso legislativo fueron dedicadas a la educación. El presidente nacional de la UCR reivindicó el ítem aula, que “mejoró no sólo el presentismo docente y de alumnos, recreando una cultura del esfuerzo, sino que ayudó a mejorar el clima escolar y los rendimientos; y valoró las mejoras educativas evaluadas mediante el operativo “Aprender”.

Foto: Coco Yañez

Luego de haber remarcado que se concretaron “acuerdos salariales con todos los sindicatos del sector público salvo uno (SUTE), garantizando que nuestros empleados no pierdan con la inflación”, y que se pagarán $1.100 millones a los docentes en concepto de “ítem zona”, Cornejo lanzó “un régimen de becas que permitirá, a quienes accedan a ellas, cobrar en los últimos 6 meses del año 10.500 pesos por estudiar y perfeccionarse”.

Las maestras mendocinas, quienes registran consecutivas pérdidas de su poder adquisitivo producto de la inflación desbocada, serán becadas en función del “mérito docente”. Quienes accedan al “estímulo” recibirán “tres pagos bimensuales de 3.000 pesos cada uno y uno final de 1.500 pesos, este último, supeditado a la aprobación de un examen sobre los saberes recibidos”, prometió el gobernador.

 


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