La escueta proyección que el gobernador Cornejo delineó el primero de mayo para su último tramo de gestión, se fue por la canaleta de la crisis. En su peor momento en el gobierno, Macri estuvo en Mendoza traspasando dosis de desprestigio a la dirigencia mendocina que se sintió obligada a recibirlo.

El costo de pertenecer

Alfredo Cornejo. Foto: Cristian Martínez

Urgido por los tiempos políticos locales, vapuleado en el horizonte nacional, presionado por las corporaciones y con delfines que no muestran suficiente garantía en las encuestas para sucederlo, Alfredo Cornejo se muestra errático y sin rumbo. Es, probablemente, la primera vez desde que es gobernador que paga una factura tan alta por su íntima alianza con el presidente.

Lógicamente, la floja performance política del mandatario es más evidente por la aguda crisis económica y política desprendida por el anuncio del regreso del FMI. Pero Cornejo acumulaba algunos problemas.

La primera dificultad de Cornejo es dar dirección a su proyecto de poder. Caída por completo su chance de forzar la reelección, sin gusto por los cargos legislativos (según le contó a La Capital en reciente entrevista), solo le quedaría competir por un cargo ejecutivo nacional a partir de 2019. Quienes lo conocen aseguran que el gobernador se anima al trofeo más grande y que sus movimientos responden a esa estrategia.

Sin embargo, al sancarlino se lo ve incómodo y contradictorio cada vez que lo rodean las luces y micrófonos de la gran ciudad. ¿Será que sus pares amarillos lo maltratan?

Foto: Prensa Gob. Mza.

El lunes pasado, antes que se anunciara el retorno al Fondo, el presidente del radicalismo fue convocado a una encumbrada reunión, de donde salió respaldando el tarifazo. Casi en el rol de vocero de Cambiemos pero en las afueras de la Casa Rosada, el gobernador de Mendoza ofrecía de esa manera un mensaje en contrario a sus berrinches publicitados de una semana atrás. Algo o alguien lo condicionó en ese cónclave y a esa altura, la crisis por la fuga de capitales ya había explotado.

En esa reunión, que intentaba por un lado poner freno político al proyecto tarifario de la oposición en el Congreso, se instaló la crisis del dólar como tema principal. Las versiones periodísticas señalan que Cornejo propuso una mayor devaluación del peso y fue desestimado en seco por el presidente.

Pocas horas después del encuentro y por cadena nacional, Macri anunciaba el retorno al Fondo Monetario Internacional. Según los radicales, ni se los consultó. Pero la cara de Cornejo, con el viento –literal- de frente, defendiendo el tarifazo preanunciaba que la cosa venía muy fulera.

Para colmo, el miércoles Macri vendría a la provincia. En medio de la nada, alcanzó a repartir su imagen negativa entre los dirigentes del radicalismo siempre prestos a las fotografías.

Ajustado porvenir

Foto: Cristian Martínez

De llegar a un acuerdo con el Fondo, el segundo semestre  estará lejos de las promesas dulces. Será a puro ajuste, coordinado por planillas Excel e involucrará a las haciendas provinciales y municipales. A poco de comenzar el cronograma electoral 2019.

El contexto dificultará la sucesión prolija y planificada que desea Cornejo. Aunque no sería extraño que la temperatura que alcance la situación le facilite el trabajo de imponer a su delfín, hoy relegado en las encuestas.

Ante este escenario, sobresale una de las pocas certezas: el desdoblamiento de las elecciones en Mendoza. En este caso, con doble función. Por un lado, intentando que el crudo resultado de los ajustes se distancie lo más posible del cronograma electoral provincial. Por otro lado, más pragmático y sensato, escaparle a la mochila de plomo que significaría compartir una lista con Macri.

Martín Kerchner, el candidato de Cornejo para la sucesión. Foto: Cristian Martínez

Aun así, habrá que esperar porque las presiones nacionales pueden cambiar estos planes. De ratificar su intención de reelección, será Macri quien necesite volumen electoral y por lo tanto contar con candidatos provinciales y municipales que traccionen “desde abajo”.

De todas maneras, todas estas son especulaciones. Vienen tiempos difíciles y la dinámica política puede transformar el escenario al extremo.

Queda claro que Mendoza padecerá mucho la política de endeudamiento de Cornejo y que la escasez de recursos será el tono de lo que le queda a la gestión de Cambiemos. El panorama es igual de sombrío para los municipios y pone en duda muchos de los anuncios del gobierno provincial.

Foto: Prensa Gob. Mza.

Las tensiones se reproducirán y no bastará con escaparle al bulto como Cornejo hizo este fin de semana en la Fiesta de la Ganadería realizada en Alvear.

Cuando se gobierna solo para los sectores con mayores recursos también aparece una certeza: el derrame de la riqueza nunca llega. El que rápidamente se dispersa es el de las crisis.

¿Llegarán los fondos para Portezuelo? ¿Cómo se desarrollará “Mendoza construye” con una escalada de precios permanente y con créditos con UVA? ¿Cuándo se “gatillarán” los acuerdos paritarios? ¿Cuán afectados se verán los servicios esenciales? ¿Alcanza con el fracking? Son algunas de la preguntas en medio del mar de la incertidumbre.

 


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