“Ratificamos el rumbo político, económico y social del país”, dijo Alfredo Cornejo en mayo de 2018, tras reunirse en Casa Rosada con el presidente Mauricio Macri. Ayer, en un evento de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, el presidente del radicalismo rectificó aquel apoyo pleno y puso en duda tanto la candidatura de su principal socio político como la continuidad de la alianza Cambiemos. Frente al fortalecimiento de Cristina, propuso además una nueva oferta electoral con dirigentes peronistas para combatir al populismo. Sin chances de influencia en el núcleo duro del PRO, el gobernador mendocino fuerza su repliegue pensando en el 2023.

Hace un año. Crónica | 7 de mayo de 2018.

Hace un año, el gobernador de Mendoza cuestionó públicamente la política tarifaria del presidente de la nación. Alfredo Cornejo, en tanto conductor nacional de la Unión Cívica Radical, fue recibido entonces por Mauricio Macri en la Casa Rosada.

Limaron asperezas, fue una de las versiones que circularon tras aquel cónclave, al que se sumaron dirigentes de la Coalición Cívica y el PRO. Otro de los trascendidos reveló que en realidad saltaron chispas entre los miembros de la alianza gobernante, y que el propio mandatario nacional le exigió al caudillo cuyano expresiones públicas de apoyo hacia la Rosada.

Video: Telenueve | 7 de mayo de 2018

Lo cierto es que Cornejo, en una improvisada conferencia de prensa en las afueras de la sede del gobierno nacional, ratificó sin más “el rumbo político, económico y social del país”. A cambio de su fidelidad, el macrismo tuvo en cuenta el reclamo por los tarifazos que hizo el gobernador mendocino y anunció un vergonzoso beneficio de cuotas con intereses en las boletas de servicios públicos.

Ayer, a tan solo un año de aquella ratificación, el mismo Cornejo cuestionó al líder máximo de Cambiemos. En un escenario comunicacional montado por la nada inocente Cámara de Comercio de los Estados Unidos, el presidente del radicalismo dijo ante empresarios que “no hay que descartar que Macri no sea candidato (a presidente)”.

Foto de archivo: Cambia Mendoza

Además, el gobernador señaló que “no se han logrado éxitos en materia económica”, que “con Cambiemos solo no se puede”, y que es necesario “un poder político mayor que el que ha logrado construir el presidente Macri”.

Sin disimular la huida cuando el barco se hunde en la casi segura debacle electoral, Cornejo avanzó un paso más para sacar los pies del plato y aventuró la creación de una nueva alianza de derecha con exaliados de la expresidenta Cristina Kirchner, para continuar con el “programa” que Cambiemos propuso en 2015, pero corrigiendo “las cosas que se hicieron mal”. Como si se tratara de una reedición de la fracasada Alianza encabezada por De La Rúa, que a fines de los 90 proponía seguir con el plan de convertibilidad del FMI pero sin corrupción.

El radical convocó a los opositores (¿?) Juan Manuel Urtubey, Juan Schiaretti, Roberto Lavagna y Sergio Massa para construir una “ampliación” de Cambiemos pero “quizás con otro nombre”.

Foto de archivo: Coco Yañez

Sin embargo, lo que Cornejo predica como innovadora coalición para el país, resultaría imposible en Mendoza. ¿Con qué dirigentes peronistas provinciales piensa sentarse el gobernador a dialogar para conformar su nueva alianza? ¿Llamará a una mesa de negociación a miembros del Partido Justicialista local, a quienes permanentemente acusa del estado de ruina en que encontró la Provincia?

Fuera del núcleo duro del PRO, la arriesgada jugada de Cornejo aparenta una proyección de su figura a nivel nacional. Pero si se tiene en cuenta el actual tablero político de cara a las próximas elecciones presidenciales, con Cristina Fernández de Kirchner liderando las encuestas y un Cambiemos convertido en una bolsa de gatos que no para de acumular derrotas provinciales y fracasos económicos, la jugada del sancarlino demuestra un intento de portazo a tiempo para conservar el terruño, y pensar que hay 2023.

 

Yo, el mejor de todos