Los privilegios obtenidos por la banda VIP de presuntos abusadores, la doble vara judicial del gobernador Cornejo y la persistente represión machista sobre los cuerpos de las mujeres, le dieron forma y contenido a las manifestaciones producidas durante la tarde de ayer en Mendoza. En la Legislatura, en repudio a la Justicia local. En San Martín y Sarmiento, replicando una acción nacional.

Fotos: Cristian Martínez y Coco Yañez

Justicia clasista

Desde las 18 horas, y luego de que la convocatoria recibiera diversas denuncias de censura en las redes sociales, se concentraron alrededor de 300 personas en la puerta de la Legislatura provincial. Si bien en un principio la manifestación se presentó bajo la consigna “Repudio a la impunidad ejercida por la Justicia mendocina para proteger a los hijos del poder”, originada en un grupo denominado Autoconvocados contra la violencia institucional, fue notorio que el reclamo se nutrió de organizaciones que confluyen en el movimiento Ni Una Menos.

De hecho durante el acto se leyó un comunicado que lleva su firma, en el cual denuncian que el caso donde imputaron por abuso sexual agravado a seis jóvenes, entre los que se encuentran un hijo y un sobrino del presidente del bloque de la UCR en la Cámara de Diputados, César Biffi, “muestra cómo los hijos del poder corren con el acompañamiento de la Justicia de Mendoza, quien utiliza distintas varas para juzgar los delitos”. En el reclamo de justicia, agregaron que “desde este colectivo de mujeres Ni Una Menos, confiamos en el relato de las mujeres que denuncian situaciones de violencia, nosotras no mentimos, no hacemos falsas denuncias y mucho menos consentimos violaciones”. Por último, el comunicado repudió tanto “las declaraciones del gobernador Cornejo frente a este caso”, así como “a los violentos que son parte del gabinete del gobierno provincial”, haciendo hincapié en el Director General de Escuelas Jaime Correas.

 

Cuerpos libres

Impregnada de la exigencia de igualdad ante la ley y el rechazo de la represión machista sobre los cuerpos de las mujeres, se replicó en la intersección del Paseo Sarmiento y la Avenida San Martín el “tetazo” nacional, surgido como protesta luego de que unas veraneantes que disfrutaban de la playa sin corpiño en Necochea fueran reprimidas por un aparatoso operativo de la policía local.

Una de las participantes del “tetazo” mendocino -que contó con escasa concurrencia- fue la diputada nacional Soledad Sosa, quien expresó que “estamos para defender el cuerpo de la mujer, para romper con los prejuicios, y para decir que el que está viendo algo mal en el cuerpo de la mujer que libremente decide mostrar sus tetas es porque hay una perversidad que genera el sistema o la sociedad de consumo, la mercancía sobre la mujer”. La legisladora nacional -mientras sostenía un cartel que rezaba “la teta que te ofende es la que no se vende”- valoró la iniciativa al afirmar que “en Mendoza venimos de un año bastante complicado de mucha violencia y agresión sobre la mujer, entonces salir y plantear de manera simbólica, con un cartel o mostrando los senos, es también muy importante”.

Por otro lado, integrantes de la AMMAR, organización de trabajadoras sexuales, salieron al cruce de la consigna que portaba Sosa, por considerar que estigmatiza injustamente a quienes ejercen libremente la prostitución.