Un grupo de trescientos jóvenes, custodiados por la policía, se congregó frente a la Legislatura de Mendoza para rechazar el proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. EL OTRO dialogó con Giulietta Olivero, militante de “Marcha por la vida”.

Fotos: Cristian Martínez

Giulietta es misionera de la Iglesia Católica y miembro de Fundación CONIN. En diálogo con este diario, la militante de “Marcha por la vida” realizó un balance de la jornada, manifestó su rechazo a la legalización del aborto y planteó hacia el futuro: “Con ley o sin ley, seguiremos trabajando”.

¿Cómo fue para ustedes la jornada de hoy?

A las seis de la tarde nos juntamos todos los jóvenes, con guitarra, mate, cosas para compartir. Una movida bien grande para salvar las dos vidas. Queremos mostrar ahora que la Argentina quiere salvar las dos vidas. Si sale la ley, que es algo que nosotros vemos que no es probable, verdaderamente no nos influye porque vamos a seguir trabajando, es más, nos va a redoblar las fuerzas para seguir trabajando.

La mayoría de estos jóvenes nos acompañan a misionar a los barrios humildes, a dar charlas, talleres, capacitaciones a las madres… Sacamos madres de la prostitución para darles capacitación y trabajo.

Estamos acá sin banderas políticas ni religiosas.

¿Van a esperar el resultado de la votación aquí?

No. Vamos a estar hasta las once, once y media. Muchos jóvenes son menores de edad y tienen que cumplir con su primer deber que es la educación. Hay que ir temprano a la casa, porque mañana, sea legal o ilegal el aborto, sigue la vida. No es que si mañana no tengo ganas de ir a la escuela no voy. No, flaco, ¡andá a la escuela que es tu primer derecho!

Después de estos últimos meses de debate, ¿cuál es el balance que hacés?

Verdaderamente es lamentable porque se está debatiendo una ley que es anticonstitucional, en la República Argentina y a nivel internacional. Pero bueno, se dio y estamos en democracia.

Giulietta Olivero.

¿Encontraste algo positivo en este debate?

Sí, que se cayeron las caretas. En mis ambientes personales, pasó, por ejemplo esto de que “si sos ‘pro vida’ te corro…” No me parece que tenga que ser así, porque somos familia.

¿Cuál es la perspectiva que tenés para adelante?

Con ley o sin ley, seguiremos trabajando. No se trata de dos caras de la plaza. Es toda Mendoza reunida por la vida. A algunas nos interesan las dos vidas y a otras les interesa la vida de la mujer.

Podemos coincidir, con respeto, se puede convivir. Basta de esto de verdes o celestes. Somos todos mendocinos, todos hermanos.

 

 

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