Fabio Calcaterra, primo hermano del presidente, resultó ser el empresario más beneficiado por el “bono fiscal” lanzado por el gobierno de Mendoza. Un grupo de diputados del peronismo solicitó la creación de una comisión investigadora que indague cuáles han sido los criterios para otorgar el crédito, al considerar “por lo menos llamativas algunas adjudicaciones”.
En abril pasado, el gobierno provincial anunció el lanzamiento del Programa de fomento a la inversión estratégica, conocido también como bono fiscal. La ley 8923 de Impositiva, aprobada a fines de 2016 le dio plafón legal, previendo 1000 millones de pesos como “costo tributario total” para el ejercicio 2017. Luego, a través del decreto 539/17, el gobernador Alfredo Cornejo reglamentó la forma y requisitos para participar, estableciendo el 26 de junio como fecha límite para la presentación de proyectos.
El objetivo del programa radicaba en aumentar la competitividad de las industrias locales, fortaleciendo las cadenas de valor y el incremento de la actividad económica y por ende, la generación de empleo.
El 7 de setiembre, Cornejo –acompañado por los ministros Nieri, Kerchner y Garay- anunció las propuestas beneficiarias y redobló la apuesta al afirmar que “se invertirán 4100 millones de pesos para proyectos con Bono Fiscal”. Durante el acto, el gobernador además expresó que “la iniciativa generará 2000 puestos de trabajo”, esperando que unos 2300 millones de pesos queden en la economía mendocina por el compre local.
Los más de 50 beneficiarios con la herramienta estatal se distribuyeron en los distintos rubros previstos: energías renovables, tecnologías de la información y comunicación, agroindustria, industria de base no agraria, inversiones productivas estratégicas y servicios e inversiones comerciales.
Peronistas quieren saber de qué se trata
Durante una conferencia de prensa convocada ayer, los diputados Lucas Ilardo, Carina Segovia y Jorge Tanús solicitaron la creación de una comisión investigadora en el ámbito legislativo. Según Ilardo, “nos han llamado la atención algunas particularidades, por lo que hemos presentado un proyecto para crear una comisión investigadora integrada por dos miembros de cada bloque y que nos remitan todos los expedientes, pliegos licitatorios y los criterios que utilizó el gobierno de Mendoza para asignar el crédito fiscal, y así analizar caso por caso”.
Luego de que los diputados mencionaran las características de algunos beneficiados, Ilardo apuntó que el objetivo de la comisión “no es solo por una cuestión de transparencia, sino de igualdad de oportunidades. Porque cuando se da un crédito fiscal a alguien, existe otro mendocino que no pudo acceder al beneficio, que en definitiva es plata de todos”.
Por su parte, si la iniciativa es desestimada por el bloque oficialista, el legislador manifestó que “irán a la Justicia y Fiscalía de Estado con las denuncias correspondientes”, aunque cree que “no debería haber inconvenientes para crear la comisión investigadora si el gobierno no tiene nada que ocultar”.
Calcaterra tiene la papa
El beneficiario que acumuló todas las miradas fue Simplot Argentina S.R.L., que se llevó el crédito fiscal más voluminoso entre los otorgados: casi 86 millones de pesos.
Simplot es una multinacional dedicada a la producción de papas congeladas y conformó su filial Argentina tras asociarse a San Fili S.A.
San Fili es propiedad de Fabio Calcaterra, primo hermano del presidente Mauricio Macri, y hace un tiempo posee intereses en nuestra provincia. Según un informe del sitio digital especializado Potato Pro, “Simplot se asoció con Fabio Calcaterra, quien explota más de 7 mil hectáreas en Mendoza dedicadas al cultivo de la papa, la mayoría de ellas en San Carlos”.
Por otro lado, Argenpapa –el portal de la papa en Argentina- estimaba que en agosto se pondría “en marcha la construcción de la fábrica de papas fritas que Simplot desarrollará en Mendoza”, asegurando que “la planta iniciará sus actividades en 2018 y destinará la mayor parte de su producción al mercado externo”.
En el informe citado, Calcaterra explicó que Simplot se decidió por Mendoza por las características climáticas de la provincia, ya que “para trabajar la papa de industria se necesita más materia seca que lo que brinda la papa de consumo. Esa materia seca es la que aporta lo que podríamos llamar el crocante. En zonas como Mendoza, donde se puede programar el aporte de agua con pívot, se hace ideal el desarrollo del producto”.
Fabio Calcaterra es hermano de Ángelo, quien a través de su constructora IECSA fue uno los mayores ejecutores de obra pública del país en los últimos tiempos. Encerrado por sus vínculos con el escándalo Odebretch, Ángelo se desprendió hace poco de la constructora, aunque le será difícil quitarse el mote de testaferro de su primo hermano.
Fabio fue procesado en una causa por administración fraudulenta cuando se desempañaba como CEO de Alimentos Modernos S.A., aunque luego se le dictó la falta de mérito. Por su parte, en diciembre pasado, fue autorizado por el Banco Central para comprar el Banco Interfinanzas, una entidad que funciona como mayorista, con oficinas en Puerto Madero.
El fomento propiciado por el gobierno de Mendoza, a través de beneficios impositivos, comienza a redituarles a los grandes empresarios. En este caso, a la filial local de una empresa multinacional – líder mundial en la producción de papas pre fritas y congeladas- regenteada en nuestro país por el primo del líder nacional de Cambiemos.
Se confirma una vez más la predilección del gobernador por consolidar las simpatías y el favor de sus minorías intensas.
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